Presagio 68, febrero
Pour Razes Chef ne parviendra à bout,
Edicts changez, les serrez mis au large:
Mort Grand trouvé moins de foy, bas dedo
Dissimulé, transi frappe à bauge.
Por Tonsurados (1) Jefe no llegará al final,
Edictos cambiados, los encerrados puestos en libertad:
Muerto Grande hallado menos fe bajo dedo (2)
Disimulado, transido (3), golpeado en choza (4).
- (1) Tonsurados: Clérigos, hombres que han recibido la tonsura.
- (2) En otras ediciones consta la palabra “debout” (pie)
- (3) Fatigado, angustiado.
- (4) Habitación modesta.
Traducción:
El jefe del clero (El Papa) no llegará al final. Benedicto XVI renunció el 28 de febrero a las ocho de la tarde a ser Papa. Un gesto inédito en más de 700 años y ha vuelto a ser simplemente Joseph Ratzinger, el Papa Emérito.
A continuación nos dice que los edictos (normas o reglas) serán cambiados. Efectivamente, desde su renuncia en el Vaticano se han visto obligados a modificado multitud de normas que estaban pensadas para elegir Papa tras la muerte del anterior. Pero, ¿qué hacer si el Papa anterior aún está vivo?, ¿cómo se le llama?, ¿dónde vivirá?, ¿cuáles serán los nuevos pasos a dar tras su renuncia y hasta la proclamación del nuevo pontífice? Aunque no todos los cambios han tenido que realizarse sobre la marcha, en 2007, Benedicto XVI cambió el reglamento de la elección en el cónclave: ahora son necesarios dos tercios de los votos para salir elegido Papa.
La tercera frase no es esta clara, por lo que parece que se refiere a un hecho que aún no ha ocurrido. La muerte de un grande puede referirse a la muerte de Joseph Ratzinger, por lo que no comentaré la frase hasta que llegue el momento.
La última frase del presagio, sí que es realmente esclarecedora. Benedicto XVI adujo fatiga y problemas de salud para su renuncia. Pero a nadie se le escapa que el Papa se sintió profundamente traicionado (golpeado) por su mayordomo y angustiado por las luchas de poder intestinas. El ahora Papa emérito, ha elegido un tranquilo retiro para dedicarse a la oración en un modesto convento de clausura. Según sus propias palabras “Estaré siempre con vosotros, pero permaneceré escondido para el mundo”, en concreto estará en el convento Mater Ecclesiae del Vaticano.